viernes, 21 de mayo de 2010

LIDERES COMUNISTAS EUROPEOS


Imre Nagy (hungría)
Político comunista húngaro que protagonizó el intento de restablecer la democracia y liberar al país de la tutela soviética en 1956. Nagy optó por una línea marcadamente antisoviética, al restablecer la democracia y el pluralismo político y proclamar la neutralidad e independencia de Hungría (abandonando el Pacto de Varsovia y sacándola así de la órbita soviética).

Alexander Dubceck (Checoslovaquia)
Político eslovaco. Entre 1955 y 1958. Tras su llegada al poder se convirtió en abanderad denominada «Primavera de Praga», movimiento político de tendencias progresistas. Dichao de la política, que consiguió ganarse el apoyo de la población y la admiración de los líderes comunistas occidentales, chocó frontalmente con la voluntad soviética. Dubcek, detenido y encarcelado, se vio obligado a firmar un tratado por el que se comprometía a dar marcha atrás en las reformas emprendidas.

Nicolae Ceausescu (Rumania)
Dictador comunista rumano. Al terminar la Segunda Guerra Mundial fue elegido diputado (1946) y accedió al Comité Central del Partido Comunista (1948), al tiempo que la influencia soviética en aquella zona convertía a Rumania en un régimen comunista. Una posterior reforma de la Constitución le permitió hacerse designar presidente de la República en 1974. Durante más de veinte años, Ceausescu gobernó Rumania como un dictador implacable: mantuvo un Estado policial de corte estalinista (basado en una eficaz policía política, la Securitate), al que añadió un toque autóctono de corrupción y nepotismo.
Erich Honecker (RDA)
Político alemán. En 1967 fue designado sucesor del líder de la RDA, Walter Ulbricht, quien dimitió en 1971, año en que Honecker se convirtió en secretario general del SED y en jefe del Estado, con lo que controlaba a un tiempo el partido y el ejecutivo. Bajo su gobierno, la RDA se convirtió en el Estado con mayor represión política, pero también en el país con mayor crecimiento económico de los pertenecientes a la órbita soviética.

martes, 27 de abril de 2010

"Stalingrado" de Joseph Vilsmaier.


Trata con seriedad "El frente Este", algo que se puede decir de pocas películas sobre la Segunda Guerra Mundial.
Está muy bien rodada y algunas escenas realmente quitan el aliento, con escenas muy fuertes y sangrientas, reflejando las verdaderas consecuencias que provoca una guerra.
Trata de rehabilitar el honor del ejercito aleman, ya que en ella se nos hace ver que una cosa erán los soldados que sirvierón a su país con honor, aunque por una causa equivocada y otra cosa bien distinta los fanáticos del regimén, que cometieron toda clase de atrocidades.

Vassili Zaitsev, una leyenda viva.


La historia de Vassili Zaitsev siempre a sido creída como un completo hecho histórico. Sin embargo, no hay ninguna prueba documentada del legendario duelo entre los francotiradores Zaitsev y Konig. Se cree que el comando soviético inventó esta historia para inspirar a sus tropas cercadas en Stalingrado en sus horas más oscuras de luchar contra el ejército alemán.

Sin duda hubieron muchos duelos que ocurrieron entre francotiradores. Sin embargo, cuesta creer que el alto comando alemán enviara a buscar al principal instructor de su escuela de francotiradores, solo para encontrar y matar a un francotirador soviético. Este es el principio de una historia que comienza así:


El francotirador fue la llave para acosar y desmoralizar el ataque de las fuerzas alemanas. Los francotiradores implicados se convirtieron en héroes soviéticos. Uno de ellos era Vassili Zaitsev. Se volvió famoso después de que la prensa descubriera que logró 40 muertos en un período de diez días.

Él usaba una ronda de tiros simples cuando elegía sus blancos. Esta habilidad que él tenia la aprendido mientras cazaba ciervos en los bosques cercanos a Elininski, su hogar en las colinas de las montañas de Ural.

El 20 de septiembre de 1942, Zaitsev fue a Stalingrado con la 28ª División de Rifles. Gracias a sus hazañas que lo hicieron un héroe nacional, su fama cruzó las fronteras y los alemanes le tomaran un interés excesivo. El Mayor Konig despachado a Stalingrado desde Berlín con el propósito expreso de eliminar a los francotiradores soviéticos, y el primero en su lista era Vassili Zaitsev. Los soviéticos se enteraron de la misión de Konig gracias a la interrogación de un prisionero alemán.


Koulikov y Konig primero hacen un estudio cuidadoso del terreno y de sus víctimas antes de asesinarlos.

Luego de ser asesinados dos francotiradores soviéticos, Zaitsev comenzó a perseguir a Konig. El duelo duró por varios días. Durante este tiempo Konig mató a un Oficial de Relaciones Públicas llamado Danilov, que era el encargado en duelo de la propaganda soviética (Danilov acompañaba Zaitsev y en un acto desesperado y estúpido reveló su posición para que acabara con el alemán).

Zaitsev finalmente encontró a Konig gracias a la ayuda de otro francotirador, su asistente Koulikov. Koulikov se colocó frente a un muro y levantó su casco, siendo abatido por Konig.

Konig cometió en fatal error de exponerse para confirmar la muerte, y Zaitsev le dio el tiro que lo mató.

La mira telescópica del rifle de su presa fue el mayor trofeo de Zaitsev, que todavía se exhibe en Moscú el museo de las fuerzas armadas. Pero esta dramática historia esencialmente es poco convincente. Vale el observar que no hay mención en ningun informe acerca de lo sucedido.

Nota: En la película "Enemy at the Gates" es el Oficial de Relaciones Publicas Danilov, es quién ayuda a Zaitsev a matar a Konig. Esto se hizo con el fin de adaptar el guión para la película.

martes, 9 de marzo de 2010

PERSONALIDADES POLÍTICAS DEL PRIMER TERCIO DEL SIGLO XX


Giacomo Matteotti
Político italiano. Matteotti entró en la política como socialista reformista. Era uno de los personajes más odiados por Mussolini. Tras la «Marcha sobre Roma», que llevó al poder a Mussolini en 1922, Matteotti siguió denunciando públicamente los excesos de los fascistas.

Paul von Hindenburg
Militar y político alemán. Los éxitos que logró contra los rusos le llevaron a ser nombrado jefe del Estado Mayor en 1916. Pronto se mostró como el ultraconservador que era. Viejo y enfermo, asistió impotente al establecimiento de la dictadura nazi, que se completó tras su muerte.


Eamon de la Valera
Líder nacionalista irlandés. De Valera hizo valer su veteranía para imponerse al frente del movimiento nacionalista. Luego canalizó la oposición republicana por cauces políticos cuya victoria en las elecciones de 1932 llevó a De Valera a presidir el Gobierno irlandés durante 16 años. Su retiradafue voluntaria en 1973.


Leon Blum
Político francés. En el Congreso de Tours (1920) hizo frente a la mayoría comunista partidaria de adherirse a la Tercera Internacional. Luchó en el interior del partido por mantener su línea política frente a los ataques de las alas derecha e izquierda. En 1940, los alemanes invadieron Francia. Blum fue detenido por el gobierno títere del mariscal Pétain. Acabada la Segunda Guerra Mundial en 1945. volvió a Francia y a la dirección de la SFIO. Presidió un gobierno socialista monocolor que no duró más que dos meses.

Franklin D.roosevelt
32.º presidente de los Estados Unidos de América. Frente al reto de la «gran depresión», Roosevelt impulsó un programa político conocido como New Deal (nuevo reparto). Entre sus medidas iniciales (1933) cabe destacar la reforma agraria, la Ley de Reconstrucción Industrial y la creación de la Autoridad del Valle del Tennessee. Este intervencionismo público y la propia popularidad del presidente le hicieron acumular un gran poder. Preparó así la intervención norteamericana en la guerra, que se produjo después del ataque japonés a Pearl Harbour. Roosevelt murió de cáncer.

lunes, 8 de marzo de 2010

DICTADORES DEL PRIMER TERCIO DEL SIGLO XX


Oliveira Salazar
Dictador portugués. Se mantuvo en el poder durante treinta y seis años. Sostuvo a toda costa la presencia colonial de Portugal en Asia y África. Un derrame cerebral obligó a Salazar a dejar el poder en 1968.


Miguel Primo de Rivera
Militar y dictador español. Procedía de una familia de militares ilustres. Durante los años del Directorio Militar (1923-25) se limitó a perseguir a los anarquistas. Finalmente, desautorizado por los altos mandos militares y por el rey, Primo de Rivera presentó su dimisión en 1930 y se exilió en París.


Hideki Tojo
Militar japonés. Siguió la carrera militar por tradición familiar. Dirigió la política de su país durante la guerra, destacando como uno de los militaristas más agresivos de la época. El avance de los aliados y la inminencia de la derrota hizo que fuera cesado en 1944.


Józef Pilsudski

Militar y político polaco. Nacido en el seno de una familia noble pero de escasos recursos económicos. Contribuyó a formar clandestinamente el Partido Socialista Polaco.



Miklós Horthy
Marino y político húngaro. Instauró una dictadura conservadora. Sin embargo, Horthy era contrario a la ideología nazi. la contraofensiva alemana llevó a la detención de Horthy por la SS y su deportación a Alemania. Terminada la guerra fue protegido por Estados Unidos y vivió exiliado en Portugal.

Son personajes de la historia importantes, aunque poco conocidos tuvieron repercusión en nuestra Historia Mundial. Todos seguían la ideología totalitarista fascista y contribuyeron a su expansión.

viernes, 26 de febrero de 2010

Groucho Marx, 20 aniversario de la muerte de un gran cómico

El 19 de agosto se cumplieron dos dé­cadas de su desapa­rición, Pero el cómico del puro, el bigote y las gafas de intelec­tual sigue vivo entre nosotros.

Groucho fue el rey del absurdo. Sus increíbles parrafadas, su ironía, la forma de arremeter contra todo y la velocidad de vértigo con que soltaba sus ocurrencias resultan inimita­bles. Posiblemente, el genio có­mico de Julius Henry Marx, Groucho, se fraguó durante su infancia. Nació en Nueva York, en el barrio alemán de Manhat­tan, en 1890, en el seno de una familia que podía recibir cualquier calificativo excepto el de tradicional. Su abuelo -de origen alemán y ventrílocuo y mago de profesión- había emi­grado a los Estados Unidos con 50 años, y apenas hablaba in­glés. Vivió 100 años y Groucho aprendió de él sus actividades favoritas: fumar puros y perseguir a las mujeres. La abuela, Fanny, tocaba profesionalmente el arpa, la misma que heredaría más tarde Harpo Marx. La se­gunda generación, los padres de Groucho, también era bas­tante peculiar. El padre, Sam, era un emigrante judío alsacia­no que se ganaba la vida como sastre, ejercía de ama de casa, cocinaba y cosía.

La situación en la que vivía la familia era precaria, así que su madre, Minnie, decidió formar una «troupe» de artistas con sus hijos: Chico, Harpo, Groucho, Gummo y Zeppo. Los Marx reco­rrieron América actuando como acróbatas, mimos, bailarines, payasos y cantantes, y se convir­tieron en asiduos clientes de bur­deles, que aprovechaban para vi­sitar entre gira y gira. Después, Groucho, Harpo y Chico fueron abandonando el vodevil. Desa­rrollando su faceta más cómica, sus gags llegaron a Broadway y, de ahí, a Hollywood.
Groucho era el intelectual de la familia y un auténtico devora­dor de libros. Le hubiese gustado ser médico, pero la falta de dine­ro le hizo renunciar. Se casó tres veces, la primera, a los 30 años con una jovencita de 20. En sus dos matrimonios posteriores, la diferencia de edad se fue am­pliando. En 1943 llegó la segun­da boda con una amiga de su hija y, en 1954, volvió a casarse con una chica de 19 años.

El secreto del humor de Groucho, y también de Harpo y Chico, fue esa mezcla de frescura e impertinencia ca­racterística de la niñez y que ellos conservaron hasta el fin de sus días. Groucho fue un provocador, se reveló contra el puritanismo y la es­tricta moralidad de la época.
El 19 de agosto de 1977, una neumonía acabó con la vida de Groucho. Tenía 86 años. El cómico se marchó no sin antes dejarnos su úl­tima «márxima», la de su epi­tafio:"Perdonen que no me levante"

Sus citas más célebres


Jamás aceptaría pertenecer a un club que me admitiera como socio.
Estos son mis principios. Si a usted no le gustan, tengo otros.
Él puede parecer un idiota y actuar como un idiota. Pero no se deje engañar. Es realmente un idiota.
He pasado una noche estupenda. Pero no ha sido esta
Nunca olvido una cara.pero en su caso, estaré encantado de hacer una excepción.
O usted se ha muerto o mi reloj se a parado.
Bebo para hacer interesante a las demas personas.
No piense mal de mí, señorita. Mi interés por usted es puramente sexual.















miércoles, 24 de febrero de 2010

Los felices años 20...



Un mundo cansado y maltrecho comienza la década con ganas de pasarlo bien y olvidar la guerra pasada. Estados Unidos, que ha emergido como la primera potencia mundial, fijará el rumbo en la moda, la música y el arte. Surge una pujante industria del ocio con la fonografía, el cine y la radio, que experimentaron espectaculares avances. Las costumbres se relajan y los jóvenes rechazan lo convencional a favor de un clima de mayor libertad: recortan faldas y peinados, y pierden la vergüenza de bailar en público. También es la era del Jazz. Clubes y salas de baile de todo el mundo se van a llenar con su sonido y sus ritmos sincopados. Pero conforme avanza la década, la economía se debilita, hasta que en 1929, el crack de Wall Street pone un inesperado punto final a estos felices años que hicieron Historia…

Difusión del Jazz
Los músicos negros llevaban muchos años tocando el jazz en el sur de Estados Unidos. Con el progreso de la industria fonográfica, los artistas se trasladaron a Chicago y Nueva York en busca de fortuna. De aquí, estos ritmos de influencia africana pasaron a Europa, sobre todo a Paris y Londres. Scott Fitzgerald acuñó el nombre de “Era del Jazz”. Tanto él, como su esposa, Zelda, formaban parte de ese mundillo. Sus novelas A este lado del Paraíso y El gran Gatsby reflejan magníficamente el ambiente juvenil de clase alta en los años veinte.

Vámonos al Cine
El Cine alcanza su mayoría de edad en esta década, en la que el cine mudo produjo sus mejores películas. En 1927, en El cantor de Jazz, se logra sincronizar por primera vez el sonido y la imagen. Ir al Cine se convierte en un hábito semanal, y estrellas como Mary Pickford, Greta Garbo y Rodolfo Valentino se convierten en ídolos de un nuevo público de masas.


Las Flappers
El lema de los años veinte era la libertad, lo cual tenía su reflejo en las nuevas modas, muy atrevidas y criticadas por los más conservadores. Era la época de las “flappers”, término que se aplicaba a las chicas jóvenes que se maquillaban, fumaban en público y bailaban y bebían en fiestas o en clubes nocturnos.

La nueva mujer
El papel que la mujer desempeño en la I Guerra Mundial y la adquisición del derecho al voto, acabaron con la idea de la debilidad femenina. En esta década surge la “nueva mujer”, liberada y activa, que tiene también su reflejo en la forma de vestir. Coco Chanel creó una nueva moda para estas mujeres. Sus cortes sobrios y con estilo, y sus chaquetas y jerséis de punto influyeron en esta generación y en las siguientes.

El Charlestón

En Estados Unidos surgieron muchos bailes nuevos como el lindy hop y el black bottom. Todos ellos tenían sus raíces en los ritmos sincopados de la música africana, conservados por la comunidad afroamericana. Sin embargo, el que hacía furor era el charlestón. Los bailarines se movian frenéticamente, girando los pies, extendiendo las piernas y agitando los brazos. ¿Quieres aprender a bailarlo? Pues fíjate en este video, y en poco tiempo seras un/a especialista...

Fue una época dorada sin duda. Una época que ya se la bautizó con el nombre de "Belle Epoque", cuando se olvidaron los prejuicios arrastrados de la época victoriana y de principios de siglo, y se dió paso a la modernidad en muchos aspectos. Cierto es, que áun nos queda mucho camino por recorrer, porque estamos hablando de que a estos espectáculos no podía permitirse todo el mundo asistir, pero fue el "pistoletazo" de salida para la Historia postrera del siglo XX en cuanto a los espectáculos de masas y las industrias del ocio. No habría estado mal pasar por alguno de aquellos clubes para ver una actuación en directo de Louis Armstrong o Bing Crosby, no habría estado mal, no...